De todos es conocido, que en la provincia del país, las costumbres de las personas son más arraigadas, y difíciles de cambiar, tal es la historia de miedo que les voy a platicar, que más bien parecería uno de esos mitos que la gente de provincia cuenta.
Circulaba el año de 1994, México sumido en uno de sus mayores problemas económicos, la gente de provincia, cada vez más, se iba a las grandes urbes de la república, en búsqueda de lo que el campo ya no le daba, que era lo básico para subsistir, algunos emigraban a otros países, otros más, los más arraigados, se quedaban en los pueblos en los que solo había miseria y muerte por doquier.
Dentro de todos esos mitos de pueblos en los que toda la gente se había retirado, uno de ellos el que les voy a contar, trata del mito del pueblo fantasma, un pueblo del estado de Tlaxcala, en donde pocos pobladores quedaban y luego de años, se dejaron de ver, para dar a pie a la historia que les contamos.
El pueblo de nombre Cortazar, de pocos habitantes, antes de que la mala situación del país, hiciera que todos emigraran, de repente todos los pobladores desaparecieron, y solo las personas que pasaban, por la carretera, y veían que todo estaba vacío, nadie circulaba por las calles, todo estaba cerrado, pero esto cambiaba por las noches, se cuenta de personas que por motivos, llegaron a ir en búsqueda de ayuda, se topaban con fiestas en casas, en donde se veía la gente, pero cuando las personas tocaban, de repente, todo se ponía en silencio, y todas las personas que se veían dentro de estas casas, se asomaban por las terrazas y las ventanas.
Por si esto no fuera tenebroso, las personas que se ponían en silencio, nunca se les veía los rostros, haciendo que las personas que buscaban ayuda, salieran corriendo sin pensar, asi se hizo popular el mito del pueblo fantasma de Cortazar.
Circulaba el año de 1994, México sumido en uno de sus mayores problemas económicos, la gente de provincia, cada vez más, se iba a las grandes urbes de la república, en búsqueda de lo que el campo ya no le daba, que era lo básico para subsistir, algunos emigraban a otros países, otros más, los más arraigados, se quedaban en los pueblos en los que solo había miseria y muerte por doquier.
Dentro de todos esos mitos de pueblos en los que toda la gente se había retirado, uno de ellos el que les voy a contar, trata del mito del pueblo fantasma, un pueblo del estado de Tlaxcala, en donde pocos pobladores quedaban y luego de años, se dejaron de ver, para dar a pie a la historia que les contamos.
El pueblo de nombre Cortazar, de pocos habitantes, antes de que la mala situación del país, hiciera que todos emigraran, de repente todos los pobladores desaparecieron, y solo las personas que pasaban, por la carretera, y veían que todo estaba vacío, nadie circulaba por las calles, todo estaba cerrado, pero esto cambiaba por las noches, se cuenta de personas que por motivos, llegaron a ir en búsqueda de ayuda, se topaban con fiestas en casas, en donde se veía la gente, pero cuando las personas tocaban, de repente, todo se ponía en silencio, y todas las personas que se veían dentro de estas casas, se asomaban por las terrazas y las ventanas.
Por si esto no fuera tenebroso, las personas que se ponían en silencio, nunca se les veía los rostros, haciendo que las personas que buscaban ayuda, salieran corriendo sin pensar, asi se hizo popular el mito del pueblo fantasma de Cortazar.